
Generalmente cuando recordamos cosas agradables de la niñez siempre lo
asociamos al calor, ternura y hasta el olor de las muestras de amor,
como los abrazos que recibimos de nuestros familiares y amigos más
cercanos. Un abrazo te da la fuerza para seguir, te arropa en el dolor,
te sonríe en la esperanza, te calma en la expectativa. Darlo o recibirlo
siempre será necesario y trascenderá toda frontera… En nuestros
Diálogos de Actualidad, Fernando, Enrique y David nos hablan de los
beneficios asociados a un abrazo. ¡Acompáñanos y reflexiona con
nosotros!